29 de enero de 2014

¿Corazones peligrosos?

Autor: Fernando Pascual

No es algo nuevo: algunos han considerado y consideran el cristianismo como una amenaza contra la paz y la convivencia, contra la libertad y la autonomía de los hombres.

En el mundo romano hubo quienes juzgaron con hostilidad y sospecha a la nueva doctrina venida de Oriente. Creyeron que los cristianos podrían conspirar contra un sistema social que querían conservar a cualquier precio, con sus cualidades y sus injusticias. Persiguieron a los nuevos discípulos de Cristo no sólo con escritos y con discursos, sino con leyes especiales y con ejecuciones y torturas refinadas.

27 de enero de 2014

La conversión

Autor: Santiago Kiehnle

En los Hechos de los apóstoles leemos la conversión de San Pablo. Cuando iba camino a Damasco «lo envolvió un resplandor del cielo, cayó en tierra y oyó una voz que le decía: “Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?”» (Hch 9, 3-4). A partir de este momento su vida cambió radicalmente.

San Pablo es probablemente el ejemplo más famoso de conversión. Por eso cuando nos referimos a una conversión repentina decimos que le dio el “sanpablazo”. Pero no todas las conversiones son así de repentinas. John Henry Newman es un ejemplo de ello.

Después de experimentar a los 15 años lo que él llama su primera conversión, tardó muchos años más en aceptar el catolicismo. Se convirtió en un pastor anglicano ejemplar y muy prometedor, pero poco a poco iba teniendo más y más dudas sobre su fe. Después de un largo proceso abrazó el catolicismo, y años después llegó incluso a ser cardenal.

24 de enero de 2014

Dios busca en todo nuestro bien

Autor: Navegando entre ideas

Necesitamos recordarlo: todo sirve a Dios para buscar nuestro bien. Incluso el pecado. Así lo explicaba don Vital Lehodey en su libro “El Santo Abandono”. Estas son sus palabras, que invitan a confiar en Dios:

“Empeño nuestro ha de ser crecer cada día en la fe y confianza en la Providencia. El acaso no es más que una palabra. Dios es quien dirige los grandes acontecimientos del mundo y los menores incidentes de nuestra vida. Se sirve de las causas segundas, pero éstas no obran sino bajo su impulso.

Quieran o no, los malos como los buenos no son en sus manos sino simples instrumentos; reservándose Él recompensar a los unos y castigar a los otros; quiere, sin embargo, hacer servir sus virtudes y sus defectos para nuestro adelantamiento espiritual, y ni los mismos pecados podrán estorbarle en sus designios; están ya previstos por Él y los ha hecho entrar en sus planes.

Ahora bien, Aquel que todo lo ha combinado y que es el Soberano Dueño de los hombres y de los acontecimientos, es también nuestro Padre infinitamente sabio y bueno, es nuestro Salvador que ha dado su vida por nosotros, es el Espíritu de amor ocupado por completo en nuestra santificación”.

22 de enero de 2014

Un camino con Jesucristo, el Amor Encarnado

Autor: Celso Julio da Silva

Cada año es una puerta que se abre, es un paso más en esta carrera de la vida en la que nosotros somos protagonistas y no meros espectadores. En este año que comienza cada uno de nosotros debe enfocar lo más importante para emprender ese camino, por lo que deseo recordar el pensamiento que el papa Francisco expuso sabiamente en el Ángelus del día 6 de este mes, solemnidad de la Epifanía. Reflexionó sobre dos ideas bellísimas. La primera hablaba de un “doble movimiento”-Dios que se hizo hombre por amor a nosotros y nosotros que, a través de una “atracción reciproca” nos unimos a Dios que es amor- ; la segunda idea decía que la estrella nos precede como ocurrió con los Magos de Oriente.

Jesús ya se encarnó por nosotros. Tantas fiestas y tantos regalos quizás han ocupado nuestra atención en esta última Navidad. Dios tuvo la iniciativa, descendió del cielo y vino a compartir todas las alegrías y dolores con nosotros, excepto el pecado. Aceptó ese primero movimiento solamente por amor. En realidad, el amor es movimiento, es acción, es acto, es entrega, es locura de Dios que no guardó para sí a su Hijo Unigénito (Rm 8,32). El amor que habita los cielos, donde el tiempo y el espacio inexistentes no permiten definir con palabras humanas el movimiento amoroso de un Dios, ese Amor grande y eterno cupo en un establo frio y pobre, ese Amor cupo en la estrechez de un pesebre.

20 de enero de 2014

Dios es muy mal mercadólogo

Autor: Santiago Kiehnle

Yo estoy convencido de que Dios es muy mal mercadólogo. Nos pinta su camino como muy difícil y pesado: «Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame» (Lc 9,27). A veces parece que todo es cruz, sufrimiento, persecución, incomprensión. Algunos incluso llaman a la Iglesia la Iglesia de los no: no matarás, no robarás, no mentirás, no, no, no…

Sin embargo, detrás de todo esto lo único que hay es paz, felicidad, plenitud. Ciertamente a veces es arduo el camino. Es duro seguir a Cristo, pero vale la pena cualquier sufrimiento, cualquier dificultad, con tal de gozar del cielo.

En un primer momento podemos encontrar sacrificio, dolor, dificultad, renuncia, persecución, incomprensión. Pero al final la recompensa será infinitamente superior.

17 de enero de 2014

Modernidad y dogmatismo

Autor: Fernando Pascual

Un importante sector del mundo moderno tiene sus propios dogmas, aunque no siempre sea consciente de ello. Por eso cae muchas veces en actitudes dogmáticas, exclusivistas e intolerantes.

Porque es dogmatismo considerar que sólo la propia visión merece ser propuesta y difundida, mientras las demás propuestas han de ser rechazadas y marginadas en la vida social.

Porque es dogmatismo defender que sólo ciertas ideologías tienen derecho a la libertad de expresión, mientras las demás ideas sufren una persecución más o menos sutil.

15 de enero de 2014

Escucha

Autor: José Gustavo Cerros Rodríguez

No es necesario revelar esta verdad bajo secreto, ni mucho menos ofrecer pruebas irrefutables; no, no es necesario. Sin embargo, sucede que como martillo que no cesa de golpear una y otra vez hasta ver derribado lo propuesto, así toda conciencia marcha de  oscuridad en oscuridad, cuando aún no descubre su verdadera razón de ser.

En el mismo lugar donde nace el último palpitar y donde mora el deseo de eternidad, ahí escrito está, con invisible e indeleble tinta, toda razón de existir. Pocos, he de decirlo, descubren su verdadero trayecto, porque son pocos los que se atreven a escuchar.

13 de enero de 2014

El timón de tu vida

Autor: José Gustavo Cerros Rodríguez

Aumenta la velocidad. La brisa se desliza con agilidad sobre nosotros. Los segundos rebasados han dejado de ser y solamente existe este preciso momento. Golpes y adrenalina suelen ser el mejor combustible para aquellos que les gusta conducirse “por libre”, mas para “los prisioneros” de la fe será el amor y la providencia.

¿Vale la pena preguntarse alguna vez en la vida hacia dónde voy? Creo que sí, porque ir sin dirección es igual que ir a ningún sitio.  En esta vida dejarse llevar hacia donde sopla el viento es exactamente lo mismo que encadenarse a la perdición y al sin sentido de la vida. En fin, conducirse por libre creyendo que es la mejor opción, es tristemente la fórmula de vida que muchos optan por perder de vista su Ideal.

10 de enero de 2014

Chesterton sobre el progreso

Autor: Navegando entre ideas

Era un maestro del lenguaje porque pensaba agudamente y con sentido común. Por eso releer a G.K. Chesterton estimula y hace pensar. Como estas líneas sobre el progreso y la reforma, en su famoso libro “Ortodoxia”:

“Y aquí viene el colapso y tremendo desatino de nuestra época. Hemos confundido dos cosas diferentes; dos cosas opuestas. Progresar debería significar que siempre estamos cambiando al mundo para adaptarlo a un concepto. Y hoy progresar significa que estamos cambiando el concepto. Debería significar que lenta pero firmemente traemos a los hombres: justicia y misericordia, pero significa que cada vez estamos más inclinados a dudar que la justicia y la misericordia sean deseables.

6 de enero de 2014

“Cree”

Autor: José Gustavo Cerros

A mi parecer una ilusión es una nueva esperanza, y descubrir que como hombres no podemos vivir sin ella es todo un reto.

Sucede que hay momentos en la vida en donde después de una caída viene otra,... o quizá en donde apenas nos estamos alzando de la que parecía ser la peor caída de nuestra vida y de pronto nos vemos no sin sorpresa, nuevamente por los suelos… La decisión de levantarnos está en nosotros, mas suele ocurrir en algunas ocasiones el deseo de abandonar la batalla.

La soledad que acompaña este fuerte deseo de renuncia es un arma de doble filo, porque en ella podemos llorar más nuestras penas o encontrar a ese Dios escondido que nos habla a través de nuestra conciencia suavemente, me atrevo a decir que casi susurrando; pero que al mismo tiempo grita: ¡levántate y échate andar, pues anhelo pelear a tu lado!

3 de enero de 2014

Leyes del aborto, ¿mejorarlas o suprimirlas?

Autor: Fernando Pascual

Las leyes que permiten el aborto promueven un mundo injusto. En otras palabras, una ley que despenaliza o regula el aborto es intrínsecamente injusta, es una “no ley”. Porque la ley existe para promover el orden público y tutelar los derechos de los seres humanos.

Una ley que admite la eliminación de seres humanos antes de su nacimiento va contra la esencia del derecho e implica mantener una grave situación de “delitos legalizados”, lo cual es una negación profunda del principio de igualdad.

Lo explicaba Juan Pablo II en la encíclica “Evangelium vitae”, n. 72: “las leyes que, como el aborto y la eutanasia, legitiman la eliminación directa de seres humanos inocentes están en total e insuperable contradicción con el derecho inviolable a la vida inherente a todos los hombres, y niegan, por tanto, la igualdad de todos ante la ley”. Una ley que permite estos delitos no es realmente “ley”, sino “corrupción de la ley”, recordaba también el Papa citando un texto de santo Tomás de Aquino.

1 de enero de 2014

Año nuevo

Autor: Navegando entre ideas

Inicia un nuevo año. En números, 2014. Nace el deseo de que sea bueno y santo. Y así lo esperamos desde este blog.

A todos, de corazón, deseamos las bendiciones de Dios, bajo el amparo de María, Madre buena que nos acompaña hacia el encuentro con el Padre.