Autor: Fernando Pascual
Uno de los aspectos más importantes y no siempre bien comprendidos de la misión de los Papas consiste en la “infalibilidad”. Un término que muchos no han estudiado en profundidad, y que a otros les resulta casi provocativo. ¿Puede un hombre, dicen algunos, hablar y enseñar sin equivocarse?
Expliquemos un poco en qué consiste la infalibilidad papal. La Iglesia no nace como una organización humana más. Viene de Dios, fue fundada por Cristo (Dios y Hombre verdadero), vive gracias a la acción continua del Espíritu Santo (como lo demuestran los casi 2000 años de nuestra historia).
La Iglesia, por lo tanto, cuenta con una especial ayuda de Dios. Esto ha permitido que Ella, a pesar de las ideologías, las persecuciones, los engaños, las intrigas humanas, haya podido conservar un tesoro de enseñanzas divinas, presentes tanto en la Sagrada Biblia como en la Tradición.