Autor: Fernando Pascual
El
descubrimiento de una tribu perdida y aislada en las selvas amazónicas siempre
es noticia. Porque significa que existen pueblos aún no conocidos. Y porque en
el mundo “civilizado” renace el deseo por estudiar cómo viven pueblos sin
tecnologías que para nosotros resultan imprescindibles.
Ante cada nueva
tribu descubierta, surgen preguntas de diversa importancia. Unas se refieren a
los derechos históricos que pueda tener esa tribu, que merece ser respetada en
su territorio y en aquellos modos de vivir que no impliquen injusticias contra
las personas. Otras preguntas nos ponen ante la conveniencia o no de ofrecerles
(en una aceptación que sólo ellos podrán dar si así libremente lo deciden) el
acceso a los “bienes” del mundo tecnológico y la posibilidad de abrirse al
contacto con otros pueblos y culturas.