26 de noviembre de 2018

Ser humano, cuerpo y alma


Autor: Fernando Pascual

A lo largo de la historia las reflexiones sobre el ser humano han subrayado diversas dimensiones, a veces unas más que otras.

Existen teorías que exaltan la dimensión del cuerpo. Otras dan un relieve especial al alma. Otras se fijan en funciones, como las del sistema nervioso, o en modos de vivir en grupo, en clave sociológica.

Ponemos ahora la mirada sobre el cuerpo y el alma. Hablar del cuerpo humano significa prestar atención a su presencia sensible en el mundo. Hablar del alma significa fijarnos en sus actividades intelectuales y volitivas.

19 de noviembre de 2018

Cada vez que escribas…


Autor: Álvaro Correa

Una maestra de primaria preguntó si algún niño quería prestar uno de sus lápices a un compañero que lo había olvidado.

Un pequeñín sacó los suyos de su estuche, abundantes por cierto, y la sorpresa fue ver que cada uno de ellos llevaba escrito un mensaje de aliento: “Eres muy talentoso… Eres fenomenal… Tendrás un grande año… Eres inteligente… Estoy orgulloso de ti… Te amo…”.

La autora era la madre del niño quien, de manera sencilla e ingeniosa, deseaba infundir confianza, cariño y autoestima a su hijo. Sabía que, cada vez que el niño escribiera, llevaría a su mente y corazón una motivación para superarse.

12 de noviembre de 2018

Cegueras y sensibilidades


Autor: Fernando Pascual

Por la calle, alguien abre un caramelo y tira al suelo el papel. No percibe que está ensuciando un espacio público.

En el trabajo, alguien sale de un despacho y deja las luces encendidas. No capta que desperdicia electricidad.

En el metro, alguien pasa de prisa junto a un ciego que mueve su bastón para evitar tropiezos. No se da cuenta de la necesidad de ayuda de ese ciego.

5 de noviembre de 2018

Prismáticos


Autor: Álvaro Correa

Las colinas altas y de suave pendiente son la mejor pista de lanzamiento para los amantes del “parapente”.

En uno de esos enclaves privilegiados un grupo de personas, quizás a mitad entre familiares y turistas, clavaban sus ojos en una pequeña de apenas cuatro años que, entre los brazos de su padre, se preparaba para surcar por vigésima vez un vasto horizonte.

Ahora bien, pocos se percataron de que había otro niño, a las puertas de su adolescencia, que se deleitaba escrutando el horizonte con unos prismáticos. No era la primera vez, ni se trataba de una curiosidad pasajera.