Autor: Navegando entre ideas / anónimo
Un sacerdote recibió un mensaje y pidió permiso para
publicarlo. Aquí lo recogemos en el contexto de estos días de la Semana Santa.
“Levante
su alma, no se desanime. No viva más con miras a este mundo sino, más bien, con
el deleite del mundo venidero, disfrutando de Él ya desde ahora. Pues esta no
es nuestra casa ni nuestro destino final. Permita que su espíritu nos alumbre y
florezca. No tema.
Necesitamos
tanto de la sal de la tierra. Usted es sal y es luz en nuestras vidas. El
tiempo en que usted ame será el tiempo mejor usado. Reanime esa llama de amor
en su corazón y permita que el Espíritu Santo le guíe. Los sacerdotes son tan
necesarios para el mundo.
Sabe,
tengo una teoría. Está basada en todo lo que he estado viendo a mi alrededor.
El demonio está deprimiendo a todos nuestros sacerdotes para bloquear el gran
trabajo que hacen con las almas. Por favor, Padre, no pierda la fe; no pierda
las esperanzas. Sepa que yo rezo por todos ustedes y por sus intenciones todos
los días.
Que la
bendición de Dios esté sobre usted...
Que Dios le mantenga seguro si está en peligro.
Que Dios le guíe en Su camino de amor.
Que Dios le apoye en el peligro o la adversidad.
Que Dios levante su corazón cuando se sienta deprimido.
Que Dios le consuele cuando se sienta solo.
Que Dios le dé fuerzas cuando esté débil.
Que Dios le lleve a casa cuando esté perdido.
Que Dios le rodee de amorosos cuidados, siempre.
Usted es sagrado, es elegido, es amado y es bendecido”.
Que Dios le mantenga seguro si está en peligro.
Que Dios le guíe en Su camino de amor.
Que Dios le apoye en el peligro o la adversidad.
Que Dios levante su corazón cuando se sienta deprimido.
Que Dios le consuele cuando se sienta solo.
Que Dios le dé fuerzas cuando esté débil.
Que Dios le lleve a casa cuando esté perdido.
Que Dios le rodee de amorosos cuidados, siempre.
Usted es sagrado, es elegido, es amado y es bendecido”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario