Autor:
Óscar Ramírez
Una
de las diferencias entre tú y los animales es que ellos viven “alterados” ,
pero no en el sentido en el que estás pensando… “Alterados” se refiere a que su
vida y sus acciones dependen de lo que el exterior les impone en cada momento.
Siempre están atentos a lo que sucede “fuera” porque no tienen un “dentro”.
Parece
que en nuestros días también
nosotros estamos muy “alterados”. Vivimos dependiendo de Facebook, de Twiter;
WhatsApp viene, va y regresa… Noticias, novedades, frenesí… Siempre al
pendiente de lo que pasa fuera. Demasiada atención a lo “exterior”, poca al
“interior”.
San
Agustín decía que si nos sorprendemos de las realidades hermosas del mundo
exterior (no se refería a YouTube), más todavía debemos asombrarnos de lo que
hay en nuestro interior, porque en ese interior te encuentras a ti, descubres
quién eres, qué quieres, a dónde vas…
Nadie
ha muerto por dedicar momentos de silencio para entrar “dentro” y descubrirse a
sí mismo. Al contrario, los que lo hacen comienzan a vivir de verdad, porque su
actividad deja de depender en modo absoluto de lo que pasa “fuera” y comienzan
a vivir de lo que descubren “dentro”.
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