Autor: Luis Alfonso Orozco
El sitio oficial del movimiento de apostolado Regnum Christi informaba que durante la pasada Semana Santa misionaron algo más de 18,000 personas por diversos lugares de la geografía mexicana, proclamando su fe. Estas misiones de evangelización llevan cerca de dos décadas efectuándose de modo ininterrumpido -y no sólo en México, donde surgieron- sumando a miles de jóvenes e incluso a enteras familias que dejan las vacaciones durante esos días santos para irse a pasar privaciones e incomodidades con el fin de evangelizar entre los más desfavorecidos.
Se lee en un comunicado del Regnum Christi: “Durante la semana santa de este año Juventud y Familia Misionera pudo ofrecer a la Iglesia poco más de 18,000 misioneros en todo México para confirmar en la fe y llevar un mensaje de esperanza a las poblaciones más necesitadas del país. Como en años precedentes, la «Megamisión 2012» se inserta en la «Misión Continental » querida por los obispos de América latina y el Caribe, tal y como se está llevando en otras diócesis mexicanas, bajo las directrices específicas de los párrocos. Participaron poco más de 200 sacerdotes legionarios de Cristo, algunos de ellos llegados a México desde Roma”.
El hecho resulta muy significativo si se toma en cuenta el clima de inseguridad que padecen varias regiones de México. Aún así las personas no han querido desistir de su cita anual para proclamar su fe católica y compartir momentos intensos de generosidad con la gente de los lugares a donde acuden. Los organizadores de estas misiones son los mismos laicos católicos, padres de familia, profesionistas, jóvenes de Juventud Misionera, estudiantes universitarios. Los encargados se ponen de acuerdo con los párrocos de las zonas a misionar para obtener su apoyo y autorización.
Los sacerdotes legionarios de Cristo colaboran acompañando a los diversos grupos de misioneros y ellos se encargan del ministerio sacramental, dejando la organización a los laicos. El resultado es una simbiosis bien tramada de colaboración y trabajo eficaz donde cada quien respeta las competencias del otro y se obtienen frutos magníficos. Dios con su gracia los mueve a todos.
Las “Megamisiones” surgieron en los inicios de la década de los noventa por iniciativa de un grupo de jóvenes pertenecientes al movimiento Regnum Christi. A partir de ahí su crecimiento ha sido vertiginoso y se ha ido difundiendo de México a otros países de América e incluso de Europa, si bien las modalidades cambian y se adaptan a cada situación. El espíritu misionero está vivo.
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